En un comunicado la Conferencia Episcopal, a propósito de la oleada terrorista perpetrada presuntamente por el ELN, esta expuso que «es hora de optar por la cultura del diálogo para proponer alternativas al país».
“Como Iglesia, en medio de la situación que afecta al país y particularmente a algunas regiones, hacemos un llamado a respetar la vida, a buscar caminos de diálogo y “a abandonar los caminos de la intolerancia y la violencia -que tanto despojo, dolor y muerte han dejado- y emprender juntos las sendas de la amistad social, vía preciosa para consolidar una sana convivencia” (Mensaje de los Obispos católicos de Colombia a propósito del año electoral, febrero 17 de 2022)”, señala el mensaje, episcopal.
“En este contexto, expresamos nuestra más profunda preocupación por la escalada de acciones violentas que se están realizando en varios lugares del territorio nacional, a causa del denominado paro armado promovido por el ELN, el cual ha tenido diversas expresiones bélicas mediante explosiones que han dejado heridos graves, interrupción de la movilidad, intimidaciones a la sociedad civil y desabastecimiento”, agrega.
“La Iglesia en Colombia llama al ELN a abandonar el camino de la violencia y a mostrar signos coherentes de verdadera voluntad de diálogo. Esperamos del Estado colombiano la protección efectiva e integral de los territorios afectados y el reconocimiento de la agudización del conflicto. Exhortamos a la sociedad civil a un decidido compromiso democrático que nos permita construir un país mejor, sin violencia y con justicia social. Exigimos al ELN y a todos los grupos armados el respeto al derecho internacional humanitario y reflexionar en torno a las múltiples afectaciones que causan a nuestro país y lo precipitan hacia un absurdo río de sangre y odio”, finalizó.
La oleada terrorista comenzó en Cúcuta. Cuando en la madrugada la Policía verificaba una caja sospechosa en inmediaciones del Anillo Vial Oriental, esta explotó causándole la muerte a Jelly, una perrita de la Fuerza Pública experta en detección de explosivos. Con el artefacto también resultó herida su cuidadora.
Horas después, en Norte de Santander se reportó otro paquete sospechoso el cual logró ser detonado sin causar mayores afectaciones. Más una volqueta con los colores elenos fue atravesada de extremo a extremo de la vía, impidiendo el tránsito vehicular entre Cúcuta y Sardinata.
Este paro armado, sin embargo, se sintió en otros lugares. Uno de los ataques más fuertes fue en Pailitas, Cesar, municipio en el que a las 4:30 de la mañana fue volado con explosivos el puente Trujillo. Para su reconstrucción, Molano dispuso de maquinaria y tropas del Ejército, las cuales comenzaron en la tarde de este miércoles las obras del puente de 27 metros de largo.
Asimismo, en el Cauca en la vía que conduce de Cali a Popayán, se registró la quema de un vehículo tipo camión que transitaba a la altura del municipio de Piendamó en el sector de El Descanso. Hombres armados habrían interceptado el vehículo, para posteriormente amenazar al conductor y obligarlo a descender de este para poder quemar el automotor. Al mismo tiempo, varios ciudadanos reportaron el hallazgo de algunos cilindros en la vía principal que pasa cerca del municipio de Cajibío. Sobre la vía panamericana entre Timbío y Popayán, varios habitantes reportaron el hallazgo de un ataúd vacío.
En la vía Panamericana se registró la incineración de un vehículo entre los municipios de Santander de Quilichao y Caldono, específicamente en el corregimiento de Pescador. Según la información aportada, varios hombres hicieron bajar al conductor del vehículo que transportaba alimentos y después incendiaron el automóvil.
En Santander se presentó la explosión de un artefacto que dejó heridas a cuatro personas en la vía que comunica al municipio de El Socorro con San Gil. Los heridos fueron trasladados a centros asistenciales; hacen parte como contratistas de Invías y se encontraban sobre el sector Leche de Cabra en la vía nacional. La investigación busca establecer los autores del hecho que estarían directamente vinculados con el paro armado.
De acuerdo con informaciones preliminares, los trabajadores se percataron de que en la vía había un paquete sospechoso envuelto en una cinta, y al momento de acercarse, este detonó.
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