En el Día Internacional de la Mujer El Unicornio recomienda diez películas que exaltan la importancia que esta tiene en la sociedad, en el contexto de un mundo cada vez menos machista, aunque todavía lejos de darles a las féminas la verdadera equidad que por derecho propio tienen.
Talentos ocultos. Además de reconocer la contribución de tres mujeres matemáticas y científicas, es una historia antirracista. Las tres son afroestadounidenses y debieron afrontar su exclusión, no solo por su condición de mujeres sino por ser negras. Basada en hechos reales y en el libro de Margot Lee Shetterly, la película se centra en las vidas de Katherine Johnson, quien calculó la trayectoria de las misiones Apolo y Mercurio, Dorothy Vaughan, la primera supervisora de la Nasa y Mary Jackson, que se convirtió en 1958 en la primera ingeniera afroestadounidense de la Nasa. Se recuerda como, solo por relatar uno de los hechos discriminatorios, ellas debían ir a unos baños para mujeres negras, y no podían usar el de las mujeres blancas. La cinta fue protagonizada por Octavia Spencer, Taraji P. Henson y Janelle Monáe, y dirigida por Theodore Melfi, fue la más taquillera en EE.UU. en los dos fines de semana posteriores a su estreno y nominada a tres premios Óscar.
Persépolis. Es la conmovedora historia de una chica iraní desde la revolución islámica hasta ahora. La historia comienza cuando los fundamentalistas toman el poder forzando a las mujeres a llevar velo y encarcelando a miles de personas. Sin embargo ella es muy astuta y descubre el punk, ABBA y a Iron Maiden mientras vive el terror de la persecución del nuevo gobierno y la guerra de Irán e Iraq. Como adolescente la envían a Europa donde por fin puede comparar otras culturas con el fundamentalismo religioso del que escapó. Esta película francesa animada dirigida por Vincent Paronnaud está basada en la novela gráfica homónima de Marjane Satrapi.
Las Horas. Historia de tres mujeres de épocas diferentes que tratan de encontrarle un sentido a la vida. A principios de los años 20, Virginia Woolf, en un elegante barrio de Londres, lucha contra su locura mientras empieza a escribir su primera gran novela: «Mrs. Dalloway». En los años 50, en Los Ángeles, a Laura Brown, una mujer casada y con hijos, la lectura de «Mrs. Dalloway» le resulta tan reveladora que empieza a considerar la posibilidad de cambiar radicalmente su vida. En Nueva York, Clarissa Vaughan, una versión actual de «Mrs. Dalloway», está enamorada de su amigo Richard, un brillante poeta enfermo de sida. Nicole Kidman que interpretó a la escritora británica obtuvo el Óscar a mejor actriz, el único premio obtenido de las nueve nominaciones que tuvo la historia, incluida la de su director Stephen Daldry.
La voz de la igualdad. El filme, de corte biográfico, muestra pasajes desconocidos de la vida de Bader Ginsburg, Ginsburg, la jueza de la Corte Suprema de Justicia que falleció el año pasado a los 87 años debido a un cáncer de páncreas, era un ícono feminista y progresista del máximo tribunal judicial de EE.UU. para asuntos como la igualdad de género o la inmigración, el aborto o el matrimonio igualitario. La cinta muestra aspectos como la discriminación que vivió en la universidad, simplemente por ser mujer. A pesar de que Bader, interpretada por Felicity Jones, demostró ser la mejor de su clase, había personas convencidas de que su presencia en la academia era innecesaria y que su lugar estaba en su casa cuidando a su familia. La cinta, dirigida por Mimi Leder, también muestra cómo la discriminación que vivió continuó cuando intentó insertarse en el mundo laboral.
Erin Brockovich. Steven Soderbergh dirigió a Julia Roberts quién ganó el Óscar por interpretar a Erin Brockovich. Un filme basado en una historia real sobre una activista ambiental, empleada en una oficina de abogados, que logró ganar un importante juicio contra Pacific Gas & Electric Company: una compañía de gas y electricidad que contaminó las napas de agua de Hinkley, en California. Erin Brockovich (59), quien, gracias a la atención de la prensa, fundó su propia consultoría. Desde aquí ella alzó la voz contra el método anticonceptivo de Bayer llamado Essure. “Brockovich quiere alertar sobre lo que considera un peligroso método que esteriliza de forma permanente a las mujeres y que consiste en la inserción de pequeños espirales en forma de bobinas en las trompas de Falopio para impedir que la esperma llegue a los óvulos”, publicó la BBC.
La sonrisa de la Mona Lisa. Vuelve Julia Roberts en lo que es considerada la versión femenina de La sociedad de los poetas muertos. En esta ocasión interpreta a una profesora que llega a la universidad privada de Wellesley para enseñar historia del arte. Allí se encuentra con un grupo de alumnas que tienen como principal objetivo en la vida casarse y tener hijos, aunque esto signifique sacrificar su educación. Siempre les han dicho cómo deben comportarse, así que la tarea de ella será enseñarles a pensar por sí mismas. El director Mike Newell retrata los primeros pasos de la emancipación femenina, ambientando la historia en los conservadores años 50.
Norma Rae. Historia inspirada en hechos reales, ambientada en Alabama a finales de la década de los 70 y que tiene como protagonista a Norma Rae (Sally Field), madre soltera de dos hijos y trabajadora de una fábrica textil en las que las condiciones laborales son muy desfavorables para los empleados. Después de que un día se presente ante la fábrica un representante sindical (Ron Leibman), Norma Rae comienza a entablar amistad con él y se suma a la causa para defender los Derechos de los trabajadores, a pesar de los problemas que ello generará con los jefes de la fábrica e incluso con sus propios compañeros. En esta cinta, dirigida por Martin Ritt, Sally Field obtuvo el Óscar a mejor actriz principal.
North Country. En la película, la directora Niki Caro nos acerca a la vida de Josey Aimes, un personaje inspirado en la historia real de Lois Jenson, madre soltera con dos niños a cargo, que junto a otro grupo de mujeres mineras encabezaron en los años 80 la primera demanda colectiva por acoso sexual en Estados Unidos contra la empresa Eveleth Mines. Los resultados del juicio cambiaron la legislación en ese país, y su influencia se ha extendido a una buena parte del mundo. Protagonizada por Charlize Theron y Frances McDormand.
Thelma and Louise. Director, Ridley Scott. La primera una ama de casa, la segunda una camarera ambas se van de plan de fin de semana, las cosas se complican cuando Thelma conoce a un hombre en un bar que intenta violarla hasta que Louise le dispara con un revólver. La historia se convierte en uno de los íconos del movimiento feminista. Con una estupenda actuación de Susan Sarandon y Geena Davis, las dos nominadas al Óscar (ese año ganó Jodie Foster por El silencio de los inocentes) y una dirección acertada de Ridley Scott. Son muchas las escenas que quedan en el recuerdo como ese primera selfie de las dos cuando ni siquiera había celulares o ese momento final en contra de los típicos happy ending de Hollywood.
María Cano. No podíamos despedir esta lista sin recordar esta película de Camila Loboguerrero y protagonizada por María Eugenia Dávila que narra la historia de esta activista política que empieza su lucha por las condiciones de los trabajadores asalariados. Se recuerda como en los años 20 las personas se lanzaban a la calle, primero para apreciar a esa curiosa mujer que hablaba en público sobre asuntos de hombres, y cuando se la escuchaba provocaba la adhesión de los pobres y la indignación de las élites. Hostigaba a los ricos por la injusticia social, al gobierno por la represión a la oposición, confrontaba y denunciaba a las compañías norteamericanas bananeras, petroleras y mineras y al gobierno nacional por no garantizar el respeto a la integridad de los trabajadores y a la soberanía nacional. No nos caería mal una María Cano en la actualidad, 100 años después.
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