Por GERARDO MARTÍNEZ MARTÍNEZ
Dizque “solidaridad”
y, además, “sostenible”
es el remoquete horrible
para ocultar la verdad.
Se escacha la autoridad,
-por ladina y arbitraria-
cuando llama solidaria,
para ayudar al más pobre;
y esconde su propio nombre:
que es Reforma Tributaria.
Es que “se acabó la caja”;
dice el ministro de Hacienda.
¡Uy! Qué bueno que él entienda,
que eso resulta ser paja.
Cada día, con su marmaja
el pueblo contribuyente,
esforzado y muy decente,
llena de plata al erario.
La caja del funcionario
¡será su caja de dientes!
Para eso, los ‘delfines’
juntos fueron a palacio,
muy temprano, muy despacio,
no se sabe con qué fines.
Ya con el bolsillo en rines,
el triste contribuyente,
hoy le exige al presidente,
que no diga más mentiras;
su opinión vale ‘tres tiras’,
mas… le toca ser decente.
¡No mas impuestos, gobierno!
Cuide mejor el erario.
Suprima el gasto suntuario,
de amigotes del ‘Pre eterno’.
Ya estamos en un infierno,
de tributos esquilmados,
con salarios confiscados
entre renta y patrimonio;
deje de actuar cual demonio,
que el pueblo está ‘emberracado’.
Esos aviones que vienen
por compra, a precio excesivo,
no resultan de recibo,
si es que ya caja no tienen.
Lo que al país más conviene,
es suprimir asesores,
burócratas, consultores,
cónsules y publicistas;
payasos, reinas, artistas
prepagos y embajadores
Y por si aún falta plata,
recorten gasto al Congreso,
que ‘trabajan en exceso’
con ronquidos a la lata.
Seguro sale barata
la democracia costosa,
que entre escoltas, secres, moza,
y muchísimo ignorante,
hacen yunta de tunantes.
¡Qué cosa tan horrorosa!