En el marco de la VI Cumbre Humanitaria, el expresidente de Colombia Ernesto Samper instaló el evento que fue convocado por su fundación Vivamos Humanos, y los ministerios del Interior y de las Culturas, y la Coordinadora Humanitaria, conformada por 700 organizaciones sociales, para presentar al país el Plan Humanitario de Paz y Seguridad como una estrategia para mitigar la crisis humanitaria.
En su discurso de instalación el exmandatario afirmó que el país está volviendo a la guerra y hay un franco deterioro en las condiciones humanitarias y citó el Reporte Humanitario de Vivamos Humanos que registró que este año está cerrando con más de 1.200 eventos violentos en contra de la población civil que vive en las zonas de conflicto armado y la expansión territorial de los grupos armados aumentó 34%.
A pesar de estas cifras demoledoras que da el Reporte Humanitario, el expresidente Samper afirmó que “no es una razón para el decaimiento si no para apelar a nuestra creatividad y encontrar una nueva oportunidad de paz” e invitó al Gobierno Nacional, al Alto Comisionado de Paz y a los grupos armados para que reflexionen sobre el rumbo de la política de Paz Total y evalúen el método de negociación. Además, enfatizó en un llamado a que los grupos armados no solo estén en la mesa, si no que demuestren verdadera voluntad de paz. Como propuesta para darle otra oportunidad de paz territorial al país, dejó a disposición el Plan Humanitario de Paz y Seguridad que fue construido por la Coordinadora Humanitaria con apoyo del Ministerio del Interior, el Ministerio de las Culturas y las gobernaciones de los 16[1] territorios del país más afectados por el conflicto armado.
El Plan Humanitario de Paz y Seguridad al que se refiere el presidente y fundador de Vivamos Humanos tiene cuatro ejes principales para mitigar la crisis humanitaria: i). Derecho Internacional Humanitario (DIH), ii). Garantías de seguridad iii). Participación de la población civil iii). Cultura de Paz. Respecto a esto el expresidente enfatizó en el segundo eje y dijo que “la seguridad no excluye la paz”, pero aclaró que NO se refiere al segurismo de presencia represiva sino a una seguridad con presencia social del Estado que garantice la convivencia pacífica y las transformaciones económicas y sociales que faciliten el acceso de la población a derechos fundamentales.
El expresidente anunció también la alianza de la Coordinadora Humanitaria, el Ministerio del Interior el Ministerio de Cultura para implementar el Plan Humanitario de Paz y Seguridad y reiteró el llamado al Gobierno para que los cerca de 40 grupos y/o organizaciones delictivas que buscan salida política y negociada al conflicto tomen en cuenta estas deliberaciones de paz de los 16 territorios.
Para cerrar, el expresidente Samper agradeció la participación del ministro del interior Juan Fernando Cristo, el ministro de las Culturas Juan David Correa, las Senadoras Clara López y Maria José Pizarro. También a los integrantes de la comunidad internacional: la coordinadora Residente de las Naciones Unidas en Colombia Mireia Villar, el representante Especial Adjunto en la Misión de Verificación de las Naciones Unidas Raúl Rosende, la representante para el Alto Comisionado de los Derechos Humanos de la ONU Juliette de Rivero, la representante de ACNUR en Colombia Mireille Girard, entre otros organismo multilaterales, embajadas, organismos de cooperación internacional, plataformas de derechos humanos y acompañantes de los procesos de paz.
[1] Antioquia, Arauca, Valle del Cauca, Cauca, Caquetá, Caribe, Chocó, Norte de Santander, Córdoba, Magdalena Medio, Meta, Guaviare, Nariño, Putumayo, Santander, Tolima, Vichada.
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