Gabriel Ramón Jaimes Durán es el coordinador de fiscales delegados ante la Corte Suprema, el tercer cargo más importante de la Fiscalía. Desde el mes pasado su jefe, el fiscal general Francisco Barbosa, le encomendó el expediente contra Álvaro Uribe luego de que este último renunciara al Senado y le pidiera a la Sala de Instrucción de la Corte Suprema enviarlo a la Fiscalía por falta de competencia.
Durante la última audiencia, Jaimes solicitó a la jueza de garantías la libertad del expresidente Uribe y así se expresó: “La Fiscalía General de la Nación estima propugnar por el respeto a la legalidad, respeto por el derecho del que deviene necesariamente la libertad del ciudadano Uribe Vélez”. Pues bien, fue escuchado.
Jaimes también criticó algunas actuaciones de la Corte Suprema que “a toda luz” le habrían vulnerado el debido proceso a Uribe, agregando además que la indagatoria que habría rendido en octubre de 2019 ante la Corte Suprema presentaba inconsistencias.
Pero, ¿quién es este funcionario? ¿Cuáles son sus antecedentes? El fiscal Jaimes es egresado de la Universidad Santo Tomás (la misma del exprocurador Alejandro Ordóñez) y tiene una especialización y una maestría de la Universidad Sergio Arboleda, alma mater del Fiscal Barbosa y del presidente Iván Duque.
Pero no solo fue universidad lo que compartieron con el exprocurador Ordóñez, ya que es uno de sus hombres más cercanos y ambos tienen posiciones radicales ideológicas y religiosas afines.
El año pasado expresó indignado en su cuenta de Twitter (que ya eliminó) su protesta por la exhibición en Netflix de La primera tentación de Cristo, película brasilera que mostraba a un Jesús homosexual: “Levanto mi voz airada contra el irrespeto y la agresión de Netflix a la Santidad de Jesucristo, Hijo de Dios, y a la virgen María; fundamentos de la Fe profesada por millones de católicos en el mundo entero”.
Uno de sus últimos trinos estaba dedicado a la Virgen: “Iluminando el camino de la Santísima Virgen María a nuestras vidas”.
Sorprende eso sí que alguien que exhibe su fe religiosa de manera tan abierta, defienda a políticos que luego resultaron condenados por vínculos con paramilitares, como el exsenador Álvaro Araujo, y por homicidio agravado al exalcalde de Cúcuta, Ramiro Suárez Corzo.
Según señala el portal Cuarto de Hora, con Suárez Corzo se opuso a que se reabriera la investigación que lo vinculaba a homicidio agravado. “El simple señalamiento de haber cometido un delito, por parte de un desmovilizado, no es argumento para desvirtuar la presunción de inocencia”, dijo Jaimes. Sin embargo, Ramiro Suárez fue condenado en 2011 a 27 años de cárcel.
Cuando estuvo trabajando en la Procuraduría, Noticias Uno reportó que la salida de Gabriel Jaimes del Ministerio Público fue un misterio, asociado mediáticamente a corrupción pero del que nunca se dieron explicaciones.
De otro lado el abogado y jurista Ramiro Bejarano, apoderado del senador Iván Cepeda y declarado víctima en el mismo proceso, radicó en 2010 una denuncia penal contra Jaimes por los presuntos delitos de falsa denuncia y abuso de autoridad. Por eso se recusó a Jaimes Durán: “esa recusación atañe al hecho de que mi abogado, el doctor Ramiro Bejarano, instauró en contra del Dr. Jaimes una denuncia penal, lo cual constituye causal de enemistad grave”, expresó Cepeda a Noticias Caracol.
Del mismo modo, Bejarano publicó en columna de El Espectador titulada Autonomía Obediente, un mensaje enviado por Jaimes en el que la pretendida libertad con la que supuestamente los fiscales toman sus decisiones queda por el piso. El mensaje del pasado 23 de abril decía: “Todos los fiscales delegados deben remitir todos los proyectos sobre decisiones de fondo e informes sobre las actuaciones medulares de sus despachos a mi correo institucional, con suficiente anterioridad, para informar y valorar cada situación con el señor fiscal general de la Nación. Muchas gracias”.
Ante lo cual, Bejarano escribió: “Esta nota odiosa y peligrosa de Jaimes Durán no dejó duda de que en esas oficinas no puede moverse una aguja sin que él esté enterado o sin el visto bueno del fiscal Barbosa. Otra cosa no puede concluirse de la brusca orden a fiscales supuestamente autónomos…”
Y Bejarano hace una pregunta al procurador y a los magistrados de la Corte: “¿no amerita este mensaje iniciar una investigación disciplinaria y penal por obstrucción a la justicia, al menos la que administran los fiscales delegados ante la Corte Suprema, quienes, como se sabe, son los encargados de asuntos contra aforados o de relevancia nacional?”. Vea la columna completa aquí.
El Espectadorcontó en febrero pasado que a Gabriel Jaimes Durán el Departamento de Estado de EE. UU. le revocó la visa justo después de que Hernando Gómez Bustamante, poderoso narcotraficante del cartel del norte del Valle conocido como ‘Rasguño’, declarara sobre el caso de Álvaro Gómez, lo cual podría ser una piedra en el zapato para la fiscalía de Barbosa.
El fiscal Barbosa aseguró que esto no es cierto y que su coordinador de fiscales ante la Corte Suprema sí tiene visa, aunque fuentes de la embajada de Estados Unidos le ratificaron a El Espectador que no cuenta con ese documento.
Estos son algunos antecedentes del que ahora desde la Fiscalía General de la Nación ha asumido la defensa de Álvaro Uribe Vélez, pese a que dicha entidad se dedica a juzgar y acusar, no a defender reos y/o acusados por la justicia.