Lucy Nieto de Samper dice en su columna de El Tiempo que no se pueden pasar por alto las acusaciones de la excongresista Aída Merlano contra el actual presidente del Senado, Arturo Char, por participar en compraventa de votos.
Mientras se aclara ese enredo, dice doña Lucy, el Senado le metió otro gol a los electores: “elegir a Sandra Ramírez segunda vicepresidenta del Senado, sin que hubiera sobresalido como congresista. Se debería recordar que Sandra Ramírez es la viuda de ‘Tirofijo’, creador y jefe máximo de las Farc, un grupo guerrillero, cruel y sanguinario que durante 50 años llenó el país de terror y de víctimas”.
Aunque ella se califica como ferviente partidaria del proceso de paz, le parece que poner en ese puesto a la señora Ramírez no correspondía. Y recuerda sus declaraciones a los medios, donde la excombatiente negó que las Farc reclutaran menores y se atrevió a defender a un «traidor tan despreciable» como ‘Jesús Santrich’.
Por último, Lucy Nieto de Samper concluye que a pesar de tanta traición y obstáculos impuestos por este gobierno, la paz sigue su curso. Lea la columna completa aquí.