Hoy, cuando los miembros de la oposición y buena parte de la prensa se persignan ante cualquier asomo de corrupción en el actual gobierno, conviene recordar algunas de las perlas que marcaron el anterior mandato, donde en la gran mayoría de los casos los grandes medios apenas investigaron y muchos de los que salen a agitar banderas de honestidad se hicieron los de la vista gorda.
En este recuento no están los casos más sonados, como los 70.000 millones de Centros Poblados o la captura del senador Mario Castaño, aliado político del entonces mandatario, quien fue juzgado por cinco delitos relacionados con hechos de corrupción. Ni la reconstrucción de San Andrés tras el huracán Iota, cuando Duque anunció que tardarían cien días pero dos años después después solo se había avanzado en el 9% de las obras.
Además de todo esto, Duque intentó modificar la Ley de Garantías para las elecciones del 2022, sabiendo que era inconstitucional, lo que daba la posibilidad de celebrar contratos con entidades territoriales en plena época electoral.
Menos se puede olvidar el escándalo por la compra de votos del Ñeñe Hernández para la campaña presidencial del mandatario, que para muchos fue el títere de Álvaro Uribe.
El senador Iván Cepeda recordó otros casos que hicieron parte del presidente del Centro Democrático.
1. PROSPERIDAD SOCIAL – DPS. En un informe la Contraloría identificó que más de $22.000 millones fueron desembolsados a al menos 50.000 personas fallecidas, o que no estaban inscritas en el Sisbén.
Uno de los programas en donde se detectó una de las mayores irregularidades durante el 2021 fue Jóvenes en Acción. Fue creado para entregar un subsidio de 400.000 pesos bimensuales a jóvenes de estratos uno y dos para adelantar estudios una vez terminaran el bachillerato.
El informe encontró que a 11.116 les giraron 14.100 millones de pesos sin que tuvieran derecho a recibirlos, pues no estaban en los listados del Sisbén o no cumplían requisitos para estar en ese régimen.
Algo similar ocurrió con el programa Ingreso Solidario que buscaba dar un subsidio de 500.000 pesos a las familias más pobres del país, como parte de la ayuda del Gobierno durante la crisis social provocada por la pandemia del covid-19.
El Departamento de Prosperidad Social, a través de ese programa, giró 3.653 millones de pesos a 22.834 personas que no debían recibir esos subsidios.
2. SOCIEDAD DE ACTIVOS ESPECIALES- SAE. El desfalco de la SAE: arrendamiento de millonarios bienes con un valor reducido; concentración de bienes; no hubo certeza sobre el estado de 57,7% de los bienes inmuebles registrados en su inventario. Por otro lado, la entidad encontró que existen 581 bienes inmuebles, con una extensión significativa en hectáreas, cuyo avalúo catastral está registrado por debajo del millón de pesos.
3.UNIDAD NACIONAL DE PROTECCIÓN- UNP. Se denunciaron, entre otros hechos, uso delincuencial de vehículos de protección, blindajes falsos, ausencia de sanciones a contratistas, mafias.
4. UNIDAD DE VÍCTIMAS. En el Fondo de Reparación de las Víctimas se encontraron bienes ocupados sin autorización de la Unidad, contratación de núcleos familiares al interior de la entidad. Se encontraron 42 inmuebles, entre apartamentos y fincas, que estaban siendo arrendados por cifras absurdas: entre cuatro mil y cien mil pesos mensuales.
5. SISTEMA GENERAL DE REGALÍAS. La senadora Esmeralda Hernández denunció que más $3,8 billones fueron sustraídos mediante el pago de coimas a funcionarios de distintos niveles del gobierno Duque.
6. OCAD – PAZ. Investigaciones periodísticas encontraron entramado de corrupción en el que funcionarios del DPN, la Contraloría y congresistas, se habrían quedado con aproximadamente el 12% de los recursos que aprueba el Ocad-Paz.
7. AEROCIVIL. Falsas licencias a pilotos en los últimos tres años, irregularidades en contratación, presuntos vínculos con el narcotráfico y uso de aviones para fines irregulares.