Olga Gayón/Bruselas
¡Hermosos! Con sus armoniosos cuerpos y sus vestimentas nos enseñan que el arte no es para contemplarlo exclusiva y silenciosamente en el muro de los museos.
También, sin estridencias, nos gritan que la belleza habita en sus formas corporales y en las líneas que le imprimen a uno de los grandes pintores de Occidente. Piet Mondrian se rectangulea a través de los pasos de los modelos y nos transporta en medio de tan sensuales figuras a acariciar la delicadeza e imponencia de sus trazos.
No solo la belleza habita en la anatomía femenina… En la masculina vive y también seduce. ¡Y de qué manera!